Y AHORA TOCA A LOS OTROS

Así como esos locos que corren,

también se ven por montones,

llevan abastecimiento guardado

para todo aquel que lo necesite.

Se desplazan a gran velocidad

hacia puntos estratégicos,

cámara en mano para captar la imagen

y dejar reflejado el momento.

Con pancartas y eufóricos gritos,

animan a todos los participantes,

pero se desaforan cuando pasan,

aquellos que son parte de ellos.

Si son los otros,

aquellos que no están inscritos

pero que también participan,

gracias a ellos se hace la fiesta.

Casi por lo regular en los blogs, siempre hablamos de nosotros mismos y de hecho, se podría decir que esto es como una especie de diario personal, hablamos de competencias, de cosas del correr, pero creo que nunca hablamos de otra parte muy importante de las competencias y que siempre están ahí, por eso; esta “entrada” quiero dedicársela a ellos, ellos que siempre están desde afuera apoyando a todos los corredores.

Díganme si no es cierto, cuando se siente que ya no se puede mas, esos gritos levantan el espíritu y quien sabe de donde salen fuerzas para seguir en el trayecto, muchas veces, no se si les ha pasado, pero cuando vemos a la gente que motiva, como que a uno hasta le sale lo “elite” y hasta como que se luce.

Les voy a platicar una anécdota, igual y si leyeron la entrada: "Honor a quien honor merece", se acuerdan, en marzo cuando corría la maratón de Lala allá en Torreón, exactamente en el km 42, sin decir agua va, que me llega un calambre cual rayo caído desde el cielo anidándose en la pierna izquierda, fue tan fuerte que hizo que me moviera como cuando se electrifica uno, pero las porras que estaban ahí, creo que sabían de que se trataba y con gritos estruendosos como si quisieran espantar a un animal salvaje, así sucedió, espantaron al calambre, esto al final me ayudo para terminar corriendo hasta cruzar la meta.

Y que decir cuando sientes que ya no das más, y de repente, de la nada surge una cara familiar, díganme si no, eso nos da fuerzas para seguir, viene siendo mejor que un energetizante.

Y si, los hay aquellos que se esperan en la meta, uno a uno ven llegar a todos hasta que sus ojos distinguen a su o sus corredores.

Los mas osados, se desplazan kilómetro tras kilómetro solo para seguir de cerca a su amig@, herman@, hij@, novi@, madre, padre y porque no, hasta abuel@, otros mas, se colocan en puntos estratégicos de la ruta, donde saben que empieza el martirio para dar ánimos.

En algunos lados, como el caso del maratón Lala y el maratón Powerade, hay hasta concurso de porras.

Y bueno, solo me resta darles las gracias a todas aquellas personas que siempre están ahí en cada carrera, desde afuera apoyando y motivando corredores al por mayor, en especial a Edson, que igual apoya a su esposa y de paso nos regala animos a los demas, venga Edson, vamos por esos 10k de Arboledas!!!!. Comentar que a Edson, la vida le regalo otra oportunidad y poco a poco a ido recuperando asi que debemos de ir por esos 10k.

A la familia Coaching, Gaby, Misha, Mayita, gracias por sus porras, ánimos fotos y demás,  y como les he dicho: “ustedes también son incansables”.

ENORMES GRACIAS!!!!!!!