EL MARATONISTA ES INMORTAL

Hace algunos días leía en el muro de un amigo imaginario de esos que existen facebook, j aja ja!!! no es cierto, todos existimos en este mundo cibernético y aunque somos de diferentes naciones, culturas y lenguajes, estamos unidos por un solo corazón, el corazón runner.

Pero bueno, en dicho escrito se habla de la inmortalidad del corredor de fondo, o más concretamente del maratonista.

Y bueno, me pareció interesante escribir algo sobre el tema, como muchos saben, una maratón no solo se prepara con entrenos y más entrenos en las piernas, si así fuera, cada ocho días estaría corriendo una maratón.

Como bien saben; la diferencia entre un corredor de fondo o maratonista a un atleta, es la mentalidad ya que esta debe de ser fuerte y obstinada, tener una pizca de “súper héroe”.

En muchas ocasiones, el maratonista intenta ir más allá de sus límites, se vuelve obsesivo y piensa que todo lo que ha entrenado es poco, quizás por eso después de ahí salten a los ultras.

Sinceramente, cuando decido hacer una maratón, el miedo se llega a hacer presente, y es que siempre he tenido la certeza de que a una maratón vas a sufrir, aunque por ahí opinen lo contrario.

Hay algunos corredores que definitivamente no les gusta correr maratón, por que? Porque sencillamente cuando rebasan el umbral aeróbico para pasar al anaeróbico, o la tan temida zona del dolor, no les gusta sufrir.

Y bueno, como dije; la mentalidad del maratonista debe de ser fuerte, obstinada y hasta perfeccionista, cuando se entrena, no solo son las piernas, se entrena la mente, se intenta ir un poco mas allá para tentar lo que dicen la famosa “pared”, les comento que hace unos días eso fue lo que hice al hacer 34k como preparación para lo que será mi octava maratón, al llegar al km 30 mi yo interior decía: "para", "total estas entrenando, no pasa nada", y aun así en el mismo entrenamiento tuve que vencerme a mí mismo y continuar.

Comparto la idea de que los maratonistas se vuelven inmortales, primero porque emulamos a aquel héroe griego quien según la leyenda corriera la mítica distancia de Maratón a Atenas, de ahí el nombre de MARATON.

Como dicen; el maratonista aprende una lección muy importante de vida, y es que a pesar de los sacrificios y esfuerzos que hizo durante los entrenamientos, de las largas horas de soledad entrenando para acostumbrar a su cuerpo y mente a ser duros, por esa severidad y constancia con la cumplió cada uno de los entrenos, y a pesar de los dolores en la misma competencia, el cansancio, de las preguntas que en ese instante le asalten como el decir; “que diablos hago aquí si ni gano nada”, pero su obstinación le llevaran a terminar dicha carrera y aprender la lección de: “yo puedo”, "lo hice", y a pesar de que las largas horas de entreno lo hayan hecho duro, las lagrimas brotaran al cruzar la meta que importa el pudor si no cualquiera tiene la dicha de recorrer la distancia de 42 kilómetros y entonces quedara referencia de la gran hazaña que ha hecho, será héroe por un día como dice mi amigo Lucho Runner y quizás esto motive a otros a ir en busca de esa hazaña y quizás broten mas obsesivos, mas locos corredores que buscaran cruzar la meta de los 42k.

Es por eso que los maratonistas son inmortales.

Por último les comparto un poema anónimo extraído del blog de mi amiga Marcela Pensa espero lo disfruten.

Porque todos te toman por demente,

yo dedico estas líneas a tu hazaña.

Para que el mundo sepa claramente,
que hay alguien que en la lucha te acompaña.

Corredor es sinónimo de empeño,
de obsesivo, dedicado, trastornado.

Invencible en la calle y en el monte,
tus pies ambos terrenos han hollado.

Nunca entregues tu virtud, nunca te apartes,
del camino que el deporte te ha trazado.

No sufras el dolor, nunca te entregues,
ni cambies el ritual incorporado.

Fuerte es quien al prójimo supera,
invencible en cambio quien consigue
derrotarse a sí mismo y persevera
y no deja de correr ni de entrenarse.

El cansancio tus músculos castiga,
el sudor ha inundado tu remera.

Mas tu mente en modo alguno reconoce,
ninguna autoridad a la fatiga.

Corredor, estas líneas sólo aspiran,
a que nunca detengas tu carrera.